Por: Maria Camila Gonzalez Mosquera

El término "personas cortisol" gana terreno en redes sociales, describiendo a quienes elevan el estrés en su entorno.

El concepto de "personas cortisol" ha emergido como una forma popular pero no clínica de describir a individuos cuya presencia y comportamiento pueden incrementar significativamente los niveles de cortisol, la hormona del estrés, en otros. Este fenómeno, aunque no reconocido oficialmente en el ámbito médico, ha captado la atención de expertos y el público en general, especialmente en Estados Unidos y América Latina, donde la salud mental es un tema de creciente preocupación.

Carmen Harra, psicóloga clínica destacada por Psychology Today, explica que estas personas suelen exhibir rasgos como manipulación emocional, egocentrismo y una constante negatividad. Instituciones como la Clínica Mayo y Harvard Health Publishing respaldan los efectos perjudiciales del cortisol, asociándolo a problemas de salud como ansiedad, insomnio y enfermedades cardíacas. Un estudio de la American Psychological Association en 2022 reveló que la exposición continua a relaciones tóxicas puede aumentar los niveles de cortisol en un 23%.

El aumento del interés por este término refleja una mayor conciencia sobre cómo las interacciones sociales afectan nuestra salud física y mental. El reconocimiento de los patrones de comportamiento de las "personas cortisol" permite a individuos y profesionales de la salud mental identificar y mitigar posibles fuentes de estrés crónico, lo que es crucial para mantener un bienestar integral.

Aunque "persona cortisol" no es un término clínico, su uso subraya una realidad innegable: el comportamiento de algunas personas puede ser profundamente perjudicial para la salud mental y física de otros. La recomendación general es establecer límites claros y practicar la autorregulación emocional para protegerse de estos efectos nocivos. En un mundo que valora cada vez más la salud mental, entender y manejar la influencia de estas personas es vital para preservar nuestro equilibrio emocional y físico.