Por: Miguel Angel Trujillo

Colombia celebra hoy un avance crucial en materia de derechos laborales. El presidente Gustavo Petro promulga una reforma que mejora significativamente las condiciones de los trabajadores, incluyendo el recargo dominical al 100% y la extensión de la jornada nocturna.

Esta reforma, aprobada en el Congreso, representa un paso significativo hacia la equidad laboral en Colombia. Beneficios como contratos para estudiantes del SENA y la vinculación de madres comunitarias al ICBF son parte de esta ley histórica.

Este miércoles 25 de junio marca un hito en la política social colombiana. La sanción de la reforma laboral, impulsada por el gobierno de Petro, culmina un largo proceso legislativo. Esta iniciativa busca proteger y dignificar el trabajo, especialmente de los sectores más vulnerables.

El ministro del Interior, Armando Benedetti, celebró la sanción, afirmando que la reforma está "pensada para los trabajadores de Colombia". Sus declaraciones resaltan el compromiso del gobierno con la justicia social y la formalización del empleo. La reforma incluye mejoras sustanciales como el recargo dominical completo y la extensión de la jornada nocturna a partir de las 7 p.m., beneficiando directamente a miles de trabajadores.

La reforma también incluye la formalización de contratos para estudiantes del SENA y la incorporación de madres comunitarias al ICBF, reforzando la protección social y el acceso a derechos fundamentales. La celeridad en la tramitación de esta reforma contrasta con el proceso de la reforma pensional, cuya discusión en sesiones extraordinarias del Congreso busca evitar su posible hundimiento.

La aprobación de esta reforma es un paso importante hacia un modelo laboral más justo e inclusivo en Colombia. Sin embargo, el éxito de esta ley dependerá de su efectiva implementación y del compromiso de todos los actores involucrados en su aplicación. La reforma pensional, pendiente de discusión, representa el siguiente gran reto para el gobierno en su agenda de justicia social.